A raíz de la consulta de un colega, escribo este post, para explicar los diferentes tipos de switch que disponemos actualmente y ver cual se adapta mejor a cada situación. Por una cuestión de ser el producto con el que trabajo y en el que estoy certificado, me centraré en los switch de D-Link, pero los conceptos son perfectamente exportables a otras gamas como Cisco.
Tradicionalmente, los switchs se dividían en dos categorías:
Switch no gestionable (Unmanaged switch)
Este tipo de switch se caracteriza porque no permite al administrador ningún tipo de gestión o configuración, simplemente se enchufan los equipos y él realiza la función de conmutación. Este tipo de switch está pensado para entornos pequeños, donde no necesitemos segmentación a nivel de VLAN ni otro tipo de configuraciones y evidentemente, en casos donde el precio sea un factor determinante.
Switch gestionable (Managed switch).
Este tipo de dispositivo permite al administrador de red configurar múltiples parámetros para optimizar el funcionamiento y el control de la red: creación de VLAN, gestión del protocolo STP, puertos de mirroring, QoS, etc. Evidentemente, esto conlleva un aumento del precio del producto en un factor importante. La administración de estos equipos puede hacerse tanto desde un frontal web, como por comandos (CLI) tanto por puerto local, como por conexión remota (SSH o Telnet). Este tipo de switch es el más adecuado para redes medias o grandes, donde se requiera un alto nivel de control.
Sin embargo, la continua reducción del precio de los switchs no gestionables y las necesidades de un conmutación más inteligente, llevó a la aparición de un nuevo tipo:
Smart Switch
Este tipo de switchs se ha hecho un hueco entre las dos categorías anteriores. La característica principal de esta familia es que son gestionables mediante interfaz web ofreciendo una forma amigable de configuración. Este tipo de switchs está orientado a empresas de tamaño pequeño y medio, muchas veces sin un gran departamento de IT y por tanto, es básico disponer de un producto fácil de configurar. A nivel de prestaciones, permiten segmentación de tráfico, prioridades, segmentación VLAN y QoS.
Otra característica interesante de los switchs es la capacidad de apilamiento o stack, que veremos en el siguiente post.